Las modalidades de formación dual y su influencia en el empleo.

El Real Decreto 1529/2012 determina que la Dirección General de Formación Profesional del Ministerio de Educación, en colaboración con las Comunidades Autónomas, establecerá los mecanismos de recogida y tratamiento de la información del conjunto de proyectos de Formación Profesional Dual en el estado español obtenida tras el desarrollo e implantación de los mismos.

Si se realiza un estudio de las tendencias de los últimos años, se destaca:

– La modalidad más empleada fue la que consiste en la “coparticipación en distinta proporción de la empresa y los centros de formación en los procesos de enseñanza y aprendizaje”.

– Las modalidades de Formación Dual menos utilizadas son las correspondientes a la “formación exclusiva en centros formativos” y a la “formación exclusiva en la empresa”.

Las familias Profesionales que constan con más proyectos de Formación Profesional Dual son:

1.      Fabricación Mecánica con un 21 %.

2.      Electricidad y Electrónica con un 13 %.

3.      Instalación y Mantenimiento con un 10 %.

Las familias profesionales del sector secundario o industrial relacionadas con subsectores tales como: energía, textil, metal, maquinaria, química, electrónica, automóvil, entre otros, alcanzan aproximadamente el 70% de los proyectos.

Por otra parte, el 29% de los proyectos restantes son de familias profesionales relacionadas con el sector terciario, consistente en prestar servicios como comercio, sanidad, transporte, turismo, banca, etc.

Según la información de las Comunidades Autónomas, ha aumentado considerablemente el número de centros que están desarrollando proyectos de Formación Profesional Dual. En general, las Comunidades Autónomas con más centros implicados son: Cataluña, País Vasco, Andalucía, Valencia y Castilla la Mancha.

La implicación de las empresas en el Sistema Dual es muy variable según las comunidades, no obstante, el número de empresas que van a participar o están participando ha experimentado un incremento superior al 300% en el conjunto del Estado. Los incrementos más significativos se dan en las comunidades de Canarias, Castilla la Mancha, Murcia y la Comunidad Valenciana.

En cuanto a la evolución del otro sistema de Formación Dual, es decir, la Formación Profesional Dual asociada a los contratos para la Formación y el Aprendizaje, cabe destacar el importante crecimiento que están teniendo en los últimos años. Por sectores, aunque existen 84 especialidades formativas homologadas, las ocupaciones más demandas para los contratos para la Formación y el Aprendizaje son: «Dependientes de Comercio”, donde la cifra asciende al 35.2%, seguida de los “Camareros” que se sitúan en torno al 34.7%, “Albañiles”, cuyos acuerdos de Formación teórica se firman en un 8.9%, “Empleado Administrativos” con un 8% y los “Vendedores Técnicos” alcanzando un 6.6% de contrataciones.

Las Administraciones Públicas competentes adoptarán las medidas oportunas para promover la participación de las pequeñas y medianas empresas en la Formación Profesional Dual a través del contrato para la Formación y el Aprendizaje. Para ello, se incentivará la modalidad de teleformación en la impartición de la formación ofertada por la red de centros de Formación Profesional con el objeto de favorecer el acceso a la actividad formativa inherente al contrato para la Formación y el Aprendizaje de todos los trabajadores, especialmente de las pequeñas y medianas empresas. Más información en www.aenoa.com

A modo de conclusión, hasta ahora la modalidad más empleada en Formación Dual ha sido la consistente en la coparticipación de la empresa y los centros en distinta proporción en los procesos de enseñanza y aprendizaje. Además, los ciclos de grado superior predominan frente a los ciclos de grado medio. Las familias profesionales del sector secundario o industrial relacionadas con subsectores tales como energía, textil, metal, maquinaria, química, electrónica, automóvil, alcanzan el 70% de los proyectos aproximadamente.

Se está incentivando la modalidad de teleformación (elearning) con el objetivo de favorecer el acceso a la actividad formativa inherente al contrato para la Formación y el Aprendizaje de todos los trabajadores. Además, la Estrategia Española de Activación para el Empleo es el marco normativo para la coordinación y ejecución de las políticas activas de empleo e intermediación laboral en el conjunto del Estado. Es un instrumento plurianual que se elabora con el consenso de las Comunidades Autónomas.

Los bajos niveles de cualificación están asociados con menores tasas de empleo, de paro y de paro de larga duración y con mayores dificultades de reincorporación al mercado de trabajo, especialmente cuando exigen un cambio en el sector de actividad o la ocupación.

Los jóvenes que no están ocupados ni cursan estudios (reglados o no reglados), conocidos en términos de estadísticas laborales como “ninis”. España ha sido uno de los países de la UE en los que más ha crecido la proporción de estos ninis sobre el total de jóvenes menores de 25 años.

Para afrontar estos retos, la Estrategia Española de Activación para el Empleo para el periodo 2014 – 2016 establece entre otros los siguientes principios de actuación y objetivos: mejorar la empleabilidad de los jóvenes, mejorar la calidad de la Formación Profesional para el Empleo, promover la formación acreditable revisando y adecuando la FP para el Empleo, estableciendo una oferta con especial prioridad a la formación conducente a Certificados de Profesionalidad.

En la Estrategia Española de Activación para el Empleo se indica que: “El Reglamento de Formación Profesional para el Empleo velará por la máxima eficiencia en el uso de los recursos, por la adaptación de la formación a las necesidades de capacitación y aptitudes del mercado de trabajo. También establecerá, entre otros aspectos, estándares de calidad de la formación, las condiciones mínimas de la formación en alternancia, los módulos económicos máximos, los registros y la formación vinculada a la obtención de certificados de profesionalidad”.

La Formación Dual es un sistema de enseñanza que está contribuyendo a mejorar problemas del mercado de trabajo de nuestra sociedad. Su filosofía consistente en aprender a la vez que se trabaja, ha conseguido mejorar en muchos países europeos el tránsito de los jóvenes desde los estudios al trabajo, y parece ser que también está ocurriendo en España.

Este sistema de formación en alternancia con el empleo ha demostrado que los centros de formación están constantemente actualizándose para ofrecer los conocimientos que realmente demandan las empresas, además puede ser una buena solución para que disminuya el gran porcentaje de desempleo juvenil, ya que hace que los que se incorporan al mercado laboral participen con una buena experiencia en el puesto de trabajo conseguida por la formación que han recibido en la empresa.

Por tanto, una vez aceptada la necesidad de la Formación Dual y vista la buena aceptación que está teniendo en los últimos años, es necesario no quedarse en los aspectos teóricos de la misma, sino que hay que llevarla a la práctica y extenderla cada vez más. Para ello es necesaria la implicación de los agentes que participan en ella: empresas, centros de formación y Administraciones Públicas.

Las empresas no deben concebir la Formación Dual solamente como un tipo de oportunidad para abaratar los costes de contratación, sino que deben cambiar de mentalidad y ver que este tipo de formación supone una inversión a medio y largo plazo debido a que los trabajadores que forman van a estar capacitados a “su medida”, ya que ellas los seleccionan y los enseñan a trabajar según sus necesidades, lo que implica que los futuros trabajadores sean más productivos.

Por ello, las empresas deben de implicarse invirtiendo en personal cualificado que den una formación de calidad a los estudiantes en el centro de trabajo. Los centros de estudios, tanto públicos como privados, también deben apostar por la Formación Dual. Para ello, deben estar en contacto permanente con la realidad empresarial para ofrecer planes de estudios acordes a las demandas del mercado de trabajo, actualizando a los docentes a las nuevas necesidades de este mercado. Indicamos que una información amplia de la Formación Bonificada se encuentra en la web www.formacionprogramada.net

Esto supondrá un mayor éxito de la formación para la inserción en el mundo laboral. Además, para los centros privados, supone una extraordinaria oportunidad de negocio que no deben desaprovechar.

Y en tercer lugar, el Estado y demás Administraciones Públicas son las que tienen que fomentar e incentivar las acciones de las empresas y los centros de estudios mediante asesoramiento y subvenciones a ambos, lo que conseguirá que el sistema Dual tenga éxito y haga la economía del país más productiva y con menos desempleo.

La Formación Dual ya está en España implantada en el Sistema Educativo para los estudios de Formación Profesional y en el Sistema Laboral mediante el contrato para la Formación y el Aprendizaje para los estudios de los Certificados de Profesionalidad y los de Formación Profesional.

Pero no se debe quedar ahí. La Formación Dual debe implantarse de una manera efectiva en la Formación Profesional y Certificados de Profesionalidad, haciéndose realidad que los aprendices ponen en práctica y refuerzan realmente con las enseñanzas de los tutores de empresa, los conocimientos que han adquirido en el centro de estudios. Es decir que se lleve a la realidad la idea de “aprender estudiando y trabajando simultáneamente”.

Aun más, la Formación Dual también debería aplicarse en los estudios superiores, permitiendo que las capacidades que adquieran los universitarios se adapten a lo que tienen que desarrollar en sus puestos de trabajo una vez acaben sus estudios. En definitiva, sólo aplicando realmente en la práctica la filosofía de la Formación Dual se podrá conseguir un tejido laboral eficiente y eficaz que haga más productiva la economía y a la vez disminuya el desempleo juvenil.